La cura de zumo de limón dura de 4 a 10 días, sin contar los días de adaptación. Durante la cura se bebe el sirope de arce diluido en zumo de limón recién exprimido con una pizquita de cayena si se desea, lo que equivale a unos 2 litros de líquido al día. No comes nada más. Como mucho puedes complementarlo con alguna infusión.
A continuación te detallamos los motivos más frecuentes por las que se hace una cura detox:
Como máximo puedes hacer una cura de zumo de limón de 16 días. De 2 a 3 días de adaptación al inicio, 4 a 10 días de ayuno y 2 a 3 días de adaptación al finalizar. Como mínimo se debería ayunar 4 días y no más de 10.
La adaptación es muy importante por lo que debes tomártela muy en serio. Los días previos a la cura no consumas alcohol o café e intenta comer la menor cantidad de carne, azúcar y carbohidratos posible. Tómate 2 días de adaptación como mínimo.
Hay que beber todos los días 2 litros de agua con 20 cucharadas de zumo de limón recién exprimido y 20 cucharadas de sirope de arce grado C. Si lo deseas puedes añadir una pizquita de cayena molida. Esto te calentará en los días más fríos.
Lo único que se puede beber además de esta mezcla, son infusiones de hierbas aromáticas sin teína o cafeína.
¿Quieres saber qué debes comer después de la cura de zumo de limón? Sigue leyendo a continuación.
Has sobrevivido a la cura de limón y te sientes genial. Después de un tiempo de ayuno y limpieza, ha llegado el momento de volver poco a poco a una alimentación saludable y a un estilo de vida equilibrado. Pero, ¿qué comes después de tu detox? ¿Cómo evitas volver a los viejos hábitos? Aquí tienes nuestros mejores consejos.
Ahora que tu cuerpo se está acostumbrando otra vez a los alimentos sólidos, disfruta de muchas frutas y verduras frescas. Después de un detox, tu cuerpo agradece los alimentos naturales, ricos en vitaminas y minerales. Las verduras fermentadas también son una gran idea: prueba el chucrut, los pepinillos o prepara tus propios fermentos con una prensa de encurtidos.
Después del ayuno, tu cuerpo necesita reconstruirse, y las proteínas son clave. Opta por fuentes vegetales como tofu, tempeh, seitán, legumbres o alubias. Combínalas, por ejemplo, con quinoa y verduras al vapor para una comida nutritiva y equilibrada.
Enriquece tu dieta con grasas saludables. Los frutos secos, las semillas, el aguacate y el aceite de oliva son perfectos. Prepara una tostada con aguacate o añade frutos secos troceados a tu ensalada para darle un toque crujiente y nutritivo.
Sigue bebiendo suficiente agua. Después de un detox, es esencial mantener tu cuerpo bien hidratado para conservar la energía y el bienestar. Añade rodajas de limón o pepino a tu agua para darle un toque fresco.
Tras el ayuno, tus sentidos están más despiertos. Aprovecha ese momento y escucha de verdad lo que tu cuerpo te pide. Observa cómo te sientes después de comer ciertos alimentos y adapta tu dieta según tus necesidades. Cada cuerpo es diferente, así que date tiempo para descubrir lo que mejor te sienta.